Cayos en Cuba

Descubra la belleza natural de los cayos cubanos, donde le esperan arena blanca, mar turquesa y un sol radiante.

Explorar los Cayos

Aunque las razones para visitar Cuba son literalmente infinitas -su cultura, sus gentes, sus construcciones, su aire decadente, los paisajes del interior, su capacidad de subsistencia, su ritmo...- lo cierto es que son muchos los viajeros que buscan en este país días de tranquilidad. Playas desiertas -o casi- de arenas blancas, aguas cristalinas, palmeras junto al mar y sol -mucho sol- son algunos de los ingredientes más preciados por los extranjeros. Visitar los cayos cubanos es una obligación para todo turista.

El archipiélago, con casi seis mil kilómetros de costa bañada por las aguas del Caribe al sur y del Atlántico al norte, está formado por la isla de Cuba -la mayor-, la isla de la Juventud, y más de cuatro mil islotes y cayos cubanos, sinónimo de paraíso. Auténticas perlas en medio del mar, poseen hermosas playas vírgenes con poco oleaje y escasa profundidad, junto a arrecifes de coral, ideales para el baño.

La gran mayoría de los cayos no están preparados para recibir turistas, pero algunos de ellos cuentan con una infraestructura hotelera que permite a los extranjeros disfrutar de un entorno envidiable. Entre ellos, destacamos cinco de los mejores cayos cubanos:

Principales cayos de Cuba

- Cayo Coco

Este cayo cubano situado en aguas del océano Atlántico -al norte del país- en el archipiélago de Jardines del Rey, este cayo cubano es uno de los más grandes y conocidos de Cuba. Cuenta con una importante infraestructura hotelera -incluso tiene aeropuerto propio-, sin embargo, conserva numerosos rincones con bellos paisajes en los que tomar el sol, desconectar del estrés y divertirse.

Sus aguas cristalinas son ideales para la práctica de numerosos deportes náuticos, como el snorkel y el buceo, gracias a la riqueza de su colorida fauna y flora marina. Una de las grandes sorpresas que guarda Cayo Coco es la presencia de los flamencos rosados, especie autóctona de la zona sur, con una colonia que alcanza los 30.000 ejemplares.

- Cayo Guillermo

Unido por un camino natural desde Cayo Coco, Cayo Guillermo cuenta con algunas de las playas más famosas de Cuba, como las de El Paso o El Pilar, un arenal idílico, conocido con este nombre en honor al yate del periodista y escritor Ernest Hemingway, uno de los amantes más famosos de la isla.

Este cayo cubano, situado también en el archipiélago de Jardines del Rey, está mucho menos masificado que su vecino. Aunque cuenta con una amplia oferta hotelera, sus paisajes apenas se han visto alterados por la presencia de turistas, por lo que aún conserva playas vírgenes. Bucear en los arrecifes de coral o navegar en lanchas y catamaranes para explorar los mares son algunas de las actividades reservadas a quienes deciden viajar a este rincón.

- Cayo Santa María

El mayor de los cayos cubanos que forman La Herradura, en la bahía de Buenavista, es una reserva natural de la biosfera, conocida por el sobrenombre de la Rosa Blanca. Cayo Santa María se encuentra, junto con los dos cayos anteriores, en el archipiélago Jardines del Rey y se accede a él a través de una carretera rocosa de 48 kilómetros sobre el mar, lo que lo convierte en toda una experiencia.

La zona, apta para todo tipo de turistas, cuenta con numerosos complejos hoteleros, bares y restaurantes, un delfinario, un centro de buceo y un puerto deportivo, además de algunas playas de ensueño, como Las Caletas, La Perla Blanca y Cañón.

- Cayo Largo del Sur

Cayo Largo del Sur -o Cayo Largo, para abreviar- es considerado por muchos el más bello no sólo de Cuba, sino del Caribe. Este cayo cubano se encuentra en el archipiélago de Los Canarreos, en el extremo sur del país, en pleno mar Caribe, es un increíble paraíso virgen de aguas turquesas y arena blanca y fresca, que destaca por sus arrecifes de coral y su diversidad de fauna marina, así como grandes extensiones de manglares.

Entre sus 27 kilómetros de playas destacan Sirena y Paraíso, esta última reconocida en varias ocasiones por los viajeros como una de las mejores del mundo. Sin embargo, uno de los atractivos turísticos más singulares de Cayo Largo es el Centro de Rescate de Tortugas Marinas, dedicado a su cuidado y protección. Aquí es posible observar cómo son y cómo viven las crías de esta especie autóctona.

A diferencia de otras zonas del país, la oferta hotelera, aunque moderna, es limitada y respetuosa con su entorno natural.

- Cayo Levisa

Llegamos al final de nuestro recorrido, al menos concurrido y conocido de nuestros cinco cayos. Su nombre: Cayo Levisa. Este cayo cubano se encuentra en la costa norte, en el Golfo de México, en la provincia de Pinar del Río, y sólo se puede acceder a él tomando un ferry en la localidad de Palma Rubia. Y es un territorio minúsculo que no supera los 2,5 km2 con un solo hotel, por lo que podemos hablar de un rincón prácticamente intacto.

Este cayo cubano está dotado de una exuberante vegetación que desemboca junto al mar, es posible bañarse literalmente solo en medio del hermoso paisaje de la playa de Punta Arena. Practicar submarinismo o snorkel, contemplar aves como el pelícano, o dar un paseo entre manglares y bosques de pinos son algunas de las actividades propias de este idílico rincón, en el que, como dato curioso, los habitantes de Cuba tienen prohibida la pernocta.